El cáncer consiste en la proliferación anómala e incontrolada de un determinado tipo de células. Puede crecer localmente (en su sitio de origen) o emigrar a otras áreas del cuerpo, formando las llamadas metástasis.
La mayoría de cánceres de cuello y cabeza, tiene relación con un consumo importante de tabaco y/o alcohol.
Dependerán de la localización:
a) En la laringe y en la faringe se producirán uno o más de los siguientes síntomas:
- Cambio de voz (disfonía). Ante un cambio de voz que persiste más de 15 días, en un paciente fumador, se deberá acudir al otorrinolaringólogo, pues posiblemente habrá una afectación de las cuerdas vocales, situadas en la laringe.
- Dificultad al tragar (disfagia).
- Saliva con sangre.
- Sensación de dolor o irritación en el cuello y/o en uno de los oídos.
- Aparición de un bulto en cualquier área del cuello.
- Solo en casos avanzados, dificultad para respirar (disnea).
b) En la nariz, senos paranasales y nasofaringe (parte más posterior de las fosas nasales), se producirán uno o más de los siguientes síntomas:
- Obstrucción nasal.
- Alteración del sonido de la voz.
- Sangrado por la nariz, mezclada con la mucosidad nasal.
- Sensación de taponamiento de un oído.
c) En la boca, lengua, amígdala, paladar. Puede producir uno o varios de los siguientes síntomas:
- Una llaga (Úlcera) en cualquier área de la boca. Cualquier úlcera que no se cure en 15 días, duela o no, en un fumador y/o bebedor, o en un paciente que lleve algún tipo de prótesis en la boca que produzca roce, requiere visita al otorrinolaringólogo.
- Una mancha blanca o roja en cualquier área de la boca.
- Un bulto en labio, en la boca o en cuello por debajo de la mandíbula.
- Dificultad o dolor al tragar y/o masticar.
El tratamiento del cáncer de cuello y cabeza
dependerá de la localización del tumor, del tamaño y de si hay afectación a distancia (metástasis), bien de otros órganos (pulmón, huesos) o bien de los ganglios linfáticos vecinos al tumor.
Con la exploración, las pruebas radiológicas y la biopsia tendremos la información suficiente para seleccionar el tratamiento adecuado para el cáncer de cuello y cabeza. Los diversos tratamientos, aislados o combinados son:
- La cirugía: Para extirpar totalmente el tumor. En la mayoría de los casos utilizamos el Láser CO2 que nos permite una extirpación completa, con el menor sangrado y de forma indolora. Además, evita cicatrices innecesarias, la necesidad de traqueotomía (orificio en el cuello), y las dificultades al tragar.
- En caso de estar afectados los ganglios linfáticos del cuello, también se extirparán los mismos juntamente con el tumor.
- Radioterapia: Consiste en usar radiación de alta energía para destruir los tumores. Se puede usar aislada, combinada con quimioterapia, o complementando la cirugía para eliminar posibles restos microscópicos de la enfermedad.
- Quimioterapia: Consiste en el uso de medicamentos para destruir tumores. Puede administrarse por vía oral, intramuscular o intravenosa. Puede usarse aisladamente, o en combinación con cirugía y/o radioterapia.
En el cáncer de la cavidad oral (amígdalas, paladar, base de lengua), la cirugía robótica con Da Vinci mejora los resultados, reduce los errores y evita las secuelas.
La cirugía robótica, en la que el cirujano opera utilizando el robot Da Vinci, ofrece un abordaje mínimamente invasivo de las lesiones malignas, al realizarse a través de la boca, mejorando así la accesibilidad, el control visual y los resultados en dicho tipo de tumores.
En nuestro centro contamos con uno de los mejores especialistas en este campo, el Dr. Carlos Pollán.
Dr. Carlos Pollán y Dr. Juanjo Díaz-Argüello, operando un cáncer de laringe mediante el robot Da Vinci