“Los problemas sensoriales y enfermedades como la demencia son un problema creciente, pero estos hallazgos sugieren que los problemas comienzan a desarrollarse desde los primeros años de vida”. Estas son las reveladoras palabras que el Dr. Piers Dawes, jefe de un grupo de investigación de la Universidad de Manchester, ha declarado a raíz de un reciente estudio realizado.
Con él han establecido que existe una relación entre el deterioro auditivo, visual y cognitivo en la edad adulta y el escaso peso o sobrepeso al nacer, puesto que afecta al correcto desarrollo del bebé. Es por ello que recomiendan controlar su peso en los primeros meses de vida, ya que de esta forma se asegura el buen desarrollo de las capacidades del bebé, entre otras razones porque es más efectivo solucionar el problema a esa edad.
Otras causas, que no son el peso en el bebé, pueden provocar problemas en el desarrollo neurosensorial, como la desnutrición.
El estudio determinó que existen otras causas que pueden provocar problemas en el desarrollo neurosensorial. Una de ellas es la desnutrición, que también causa problemas en el desarrollo del cerebro. Otra, son las experiencias producidas a una edad temprana, que además pueden afectar al crecimiento hormonal y provocar cambios en la regulación genética.
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