Nuevos dispositivos wearables, series y música bajo demanda y auriculares inalámbricos hacen que estar conectados sea más fácil que nunca. Sin embargo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), un 50% de los jóvenes entre 12 y 35 años escuchan la música con un volumen potencialmente perjudicial y se estima que 1.200 millones de jóvenes en el mundo corren riesgo de sufrir pérdida de audición.
Según afirman los expertos, someter a nuestros oídos a un nivel de presión sonora excesivo de forma más o menos prolongada resulta especialmente perjudicial. En este sentido, si la presión sonora es más alta, la lesión se producirá en un menor periodo de tiempo que si el volumen es moderado. A pesar de ello, la susceptibilidad varía entre personas.
La exposición prolongada al ruido provoca la pérdida de mielina, las membranas aislantes de las fibras nerviosas. A pesar de ello, es recuperable y con el tiempo puede llegar a regenerarse. En los casos en los que se provoca este proceso de recuperación, suele durar aproximadamente unos tres meses.
Para evitar la pérdida de audición producida por el uso de auriculares, es recomendable:
- No superar el 60% del volumen máximo del dispositivo.
- Utilizar cascos y auriculares bien ajustados y que, a poder ser, cancelen los ruidos del entorno.
- Limitar el tiempo de uso de los aparatos auditivos personales.
- Acudir a un especialista en caso de percibir señales de pérdida de audición.
- Hacer revisiones auditivas periódicas.
¿Sientes que podrías estar sufriendo una pérdida de audición por el mal uso de auriculares? Pídenos cita en el teléfono 626 111 195 / 93 393 31 93 o escribiendo a [email protected]. Te esperamos con una respuesta a tu medida.